30 de noviembre, 2021

El marketing sensorial en hostelería

En un mundo en el que cada vez recibimos más mensajes publicitarios, las marcas y establecimientos deben aprovechar todas las herramientas con las que cuentan para destacar sobre su competencia. Una de ellas es el marketing sensorial, ¿conoces su aplicación en el sector de la hostelería?

A lo largo de nuestro día a día recibimos miles de mensajes publicitarios, la mayoría de ellos sin ni siquiera ser conscientes de ello. Cuando vemos nuestra serie favorita, en el camino de vuelta a casa, en la parada del autobús, al saltar de una story a otra… casi cada acción que realizamos está acompañada de un anuncio. Esta multiplicidad de canales ha llevado a la creación de un entorno cada vez más saturado y competitivo. ¿Qué quiere decir esto? Que si queremos llegar a los consumidores, tenemos que utilizar el ingenio y la creatividad, recurriendo a  pura y dura.

Los usuarios son cada vez más exigentes y el mensaje comercial que se utilizaba hace décadas ya no cala en la audiencia. Ahora, los consumidores quieren más, buscan experiencias y sensaciones únicas, un punto extra que les aporte algo. El marketing sensorial responde a esta nueva concepción de la relación marca-cliente, y ha cosechado grandes éxitos en los últimos años para marcas de todos los sectores, especialmente en el de la alimentación y la hostelería. Sigue leyendo para descubrir qué es y cómo puede beneficiar a tu negocio.

 

La emoción engancha

Una de las mejores formas de conectar con otras personas, en este caso nuestros clientes potenciales, es a través de las emociones. Si algo nos recuerda a nuestra infancia, si nos hace reír, si nos provoca ternura, creamos con ese estímulo una conexión. Por ejemplo, es posible que una marca concreta de galletas te guste porque son las que había en los desayunos de los domingos en la casa de tus abuelos. Por eso, cuando pasas por delante de ellas en el pasillo del supermercado sientas la necesidad de llevarte un paquete. ¿Son mejores que cualquier otra marca? No tiene por qué. ¿Son diferentes y utilizan sabores originales que no ofrecen otras? Probablemente no. Entonces, ¿qué las hace únicas? La emoción y los recuerdos que generan en ti.

Esto que parece tan sencillo de entender no es, ni mucho menos, fácil de conseguir. El marketing sensorial tiene el objetivo de lograrlo a través de los cinco sentidos, proporcionando a los consumidores experiencias diferenciadoras que conectan con su parte más emocional  influyendo en su proceso de compra y, a largo plazo, en su fidelización. 

 

Marketing con los cinco sentidos

El marketing sensorial busca, como hemos visto, generar emociones en los consumidores a través de los diferentes sentidos con los que contamos los seres humanos. Pero, ¿cómo lo hace?

La vista

Es, posiblemente, el sentido más “explotado” en el marketing, ya que impactamos a los usuarios a través de colores, imágenes, vídeos, etc. fácilmente a través de diferentes plataformas, formatos y elementos. Pueden servir como ejemplos los spots publicitarios, las imágenes de las marquesinas o el diseño de una página web. Nuestra mente comprende mejor lo que ve gracias a la vista, y lo  que es más importante, hace que lo recordemos durante más tiempo. De ahí que la tendencia pase por diseñar espacios más comunicativos e integrados dentro de una estética visual, ¡incluso hasta el diseño del menú!

El olfato

El olfato es el sentido que mejor conecta con los recuerdos, evocando momentos del pasado de manera nítida. Tiene el poder de registrar un olor unido a una emoción y que este se archive en nuestro cerebro durante décadas sin alterarse. En el caso de los espacios comerciales, muchos se han decantado por un tipo de aroma concreto. Por ejemplo, en los hoteles se demandan olores agradables como cítricos o bambú; los restaurantes suelen decantarse por los perfumes dulces y gourmand, como vainilla o chocolate. Algunas marcas han dado un paso más allá y han creado aromas especialmente diseñados para su establecimiento, como el famoso olor de las tiendas de ropa Abercrombie & Fitch.

El oído

La música tiene el poder de afectar a nuestras sensaciones, siendo capaz de relajarnos o activarnos, entre muchos otros estados. Por eso es tan importante que los establecimientos tengan la ambientación musical adecuada para que los clientes se encuentren cómodos y se desarrolle un sentimiento de confianza. ¿Sabías que según los estudios realizados al respecto, la música clásica incrementa la sensación de calidad del producto y afecta al tiempo en que las personas tardan en comer en un restaurante?

El gusto

Quizá el sentido más redundante en el sector de la hostelería, por eso no nos detendremos mucho en él. Para conquistar a un cliente no podemos olvidarnos de él, y tendremos que trabajarlo en conjunto con el resto haciendo que cierto sabor le genere sensaciones y recuerdos agradables que desea revivir. No solo valora que sepamos cómo hacer café americano, le gusta la experiencia que vive al completo.

El tacto

Aunque lo hemos dejado para el final, el tacto es el primer sentido que los seres humanos desarrollamos y lo hacemos dentro del vientre materno. Siempre ha sido una factor muy influyente en el sector retail ya que los consumidores interaccionan con los productos, parte importante en su decisión de compra final. Tenerlo en cuenta a la hora de elegir el mobiliario de nuestro restaurante o cafetería, así como todos aquellos elementos con los que interactúa el cliente, como el menaje o las servilletas, puede mejorar significativamente la experiencia de quienes nos visitan.

 

Como hemos visto, en el marketing, más allá del propio producto, lo que el consumidor compra es toda la experiencia que lo rodea. Por eso es tan importante apelar a todos sus sentidos para asegurarnos de que el café que le servimos nosotros es completamente diferente al resto, no va a poder tomárselo en ningún otro lugar. Y tú, ¿apostarías por el marketing sensorial para tu negocio? Cuéntanoslo en comentarios.