11 de agosto, 2023

Tipos de tazas de café para hostelería

El recipiente en el que sirves el café en tu negocio de hostelería es importante en la experiencia del cliente. La elección de la taza influye en la forma en la que disfruta su visita a tu local.

“¿La taza influye en el sabor del café? ¿Cuántos tipos de recipientes existen? ¿Qué vajilla es la más adecuada para servir esta bebida en mi negocio?”. Amigo hostelero, sabemos que te has hecho estas preguntas en más de una ocasión. Y en Zona Barista estamos para resolver todas las dudas, así que… ¡Esto te interesa! Porque, sí, el recipiente en el que presentas el café importa. Y mucho. Descubre los tipos de taza de café para hostelería.

 

No es que afecten a su sabor o a su aroma (si sirves un café malo, por muy mona que sea la taza, seguirá siendo malo), pero sí que ayudan a conservar sus cualidades, e incluso a realzarlas. Por tanto, la taza que utilices tendrá un papel fundamental en cómo se percibe y se disfruta el café en tu establecimiento. 

 

¿Café en taza o en vaso?

La taza es el recipiente estándar que más se asocia al café, pero cada vez son más los que se suman a tomar esta bebida en vaso de cristal, ya que es más elegante a la vista. ¿Qué es lo más adecuado? 

 

En general, las tazas son más apropiadas cuando el café se toma caliente, porque permiten tomarlo sin quemarse gracias al asa, mientras que los vasos son ideales para cafés que se toman fríos. 

 

Una vez despejado este dilema, vamos a analizar los dos factores clave a la hora de elegir las tazas de café para hostelería.

 

Tamaño

El tamaño de la taza variará dependiendo de la cantidad de líquido que se vaya a servir. En la hostelería, tanto en cafeterías como en bares, hay tres medidas que son las más comunes y resultan indispensables.

 

  • Taza para espresso: con una capacidad de aproximadamente 60 ml., es ideal para el café solo. Sorbos concentrados que hacen las delicias de los amantes del denominado ‘oro negro’. 
  • Taza para café con leche o capuchino: en este caso, el tamaño varía entre los 150 ml. y los 200 ml de capacidad. Esta medida es más adecuada para aquellos cafés que se sirven con leche o leche espumada. 
  • Taza para café doble: el café que se sirve para desayuno suele ser más grande que el que se toma después de las comidas. ¡Por la mañana los clientes necesitan una mayor dosis de cafeína! Por tanto, en estos casos la medida perfecta alcanza los 300 ml. Destacan las tazas tipo mug, que son cilíndricas, altas y con gran capacidad volumétrica.

 

Material

El material es otro aspecto a tener en cuenta a la hora de elegir un recipiente para servir el café. Como ocurre con el tamaño, depende también de qué tipo concreto de bebida que va a contener.

 

  • Taza de porcelana o loza: la taza de porcelana o loza, la de toda la vida, sigue siendo la más habitual. Estos materiales conservan la bebida en el interior caliente durante más tiempo, mientras que en el exterior no alcanza temperaturas demasiado altas, por lo que ayuda a no quemarse. Además, su tacto es agradable.
  • Taza de vidrio o borosilicato: es perfecta para cafés que se sirven en capas y también se disfrutan a la vista, como el irlandés o el vienés. Permiten a los clientes apreciar la crema, los matices y las capas, lo que añade una dimensión especial a la experiencia de degustación. Algunas tazas de vidrio se fabrican con una doble pared, lo que ayuda a mantener el café a buena temperatura sin que resulten calientes al tacto, mientras que el borosilicato es un material muy resistente tanto al calor como a los golpes.
  • Taza metálica: es una opción a descartar en cualquier establecimiento de hostelería, pese a ser muy resistentes y duraderas. Estos recipientes se calientan y enfrían muy rápidamente, por lo que es más difícil mantener estable la temperatura del café y pueden quemar mucho las manos. Además, pueden aportar un sabor desagradable a las bebidas.

 

Elegir el recipiente adecuado para servir el café en tu negocio de hostelería puede tener un impacto significativo en la experiencia del cliente y en la percepción de tu marca. Ya sea optando por la modernidad del vidrio o por una taza de tamaño espresso, cada decisión puede influir en la forma en la que los clientes disfrutan y recuerdan su visita a tu local.